Normas con sentido
Se ha comprobado que contar con normas y reglas resulta fundamental en el desarrollo de los niños, permiten brindar un ambiente seguro, siendo una guía que ayuda a discernir por dónde moverse y qué es lo que se espera de ellos. Permiten que el niño vaya adquiriendo hábitos básicos lo que resulta ser un aporte para lograr cada vez mayor autonomía y de acuerdo a su edad. Permiten que el niño vaya aprendiendo que hay un tiempo para todo y desde esta perspectiva a reconocer, tolerar y sobrepasar las frustraciones, contando en este período con la familia como un potente soporte emocional que le permita aprender a reconocer y manejar sus emociones de mejor manera…
Contar con normas y reglas desde pequeños ayuda y da bases para vivir en sociedad, estimulando una convivencia más sana y amable teniendo como base el respeto hacia sí mismo y hacia los demás. Contar con normas que tengan sentido, preocupándonos de que el niño comprenda el porqué de la norma y que no sea impuesta “sólo porque lo digo yo y punto”, permite que el niño/a vaya desarrollando criterio, y poco a poco incorpore esta norma o hábitos y aplicándolos sin necesidad de que le estén repitiendo lo debe hacer.
¿Por qué?, porque logramos que esa norma tenga sentido para él o ella; de esta forma realizará la conducta comprendiendo lo que hace y para que lo hace y no solo porque “si no lo hago me llamarán la atención”. Por ejemplo, le puedo explicar al pequeño porque tiene que lavarse los dientes después de cada comida y los beneficios de esto implica.
¿Has pensado si las normas que existen en tu casa tienen sentido?, ¿te parece que tienes muchas o pocas normas de acuerdo a la edad de tus hijos?, ¿tus conductas son coherentes con lo que intentas inculcar?
Parar y conversar respecto a este tema en nuestra casa resulta ser un ejercicio bastante enriquecedor, prueba hacerlo…
